jueves, 17 de diciembre de 2015

Incierto en la IV gala de teatro amateur de Navarra

El día de la gala es uno de los más intensos del año. Desde Incierto llevamos participando en la organización de la gala desde su primera edición y podemos constatar cómo se ha ido consolidando como uno de los días más esperados del año a nivel federativo porque nos permite encontrarnos, disfrutarnos, escucharnos, contarnos, bailar juntos...., organizar una gala que hable de lo que somos sobre las tablas.

La organización de semejante evento es costosa pero también muy gratificante. Reuniones, correos de ida y vuelta a esas maravillosas personas, que hacen de enlace entre la comisión de la gala y los grupos, y que ayudan tantísimo a que todo encaje a la perfección, elaboración de dossieres técnicos, diseños de cartelería, redacción y traducción del discurso, desarrollo del orden de actuación, impresión del photocall, organización con quienes graban la gala, bailan en ella, tocan la batucada, elaboran el lunch previo a la fiesta... ¡Incluso ensayos de los sketch con los que participamos en la gala! No es fácil pero sí muy hermoso este trabajo teniendo como meta el que toda persona que participa encuentre divertida y entretenida la gala. 

Los días previos, difusión en los medios: radio, prensa, televisión... , pegada de carteles, últimas llamadas, últimos correos, últimas gestiones. Y llega el día. Organización de lo que será el estar entre patas. Tanta gente, tantos grupos participantes, que la labor de regiduría es crucial. Organización.

 Pegando carteles en Berriozar

Rueda de prensa con el alcalde de Berriozar

 Difundiendo la gala en Xaloa telebista

 Elaborando el dossier de regiduría

Y la maquinaria se pone en marcha. Ya es imparable. La lona del photocall extendida, la batucada llega, el lunch está presto, los grupos empiezan a aparecer, las pruebas de voz en escena mientras comienza los flashes en el vestíbulo, el cava burbujea... Dan las ocho y todxs hacia el interior del auditorio. Se apagan las luces, se despierta la magia del teatro negro. La presentación divertida y fresca, bilingüe y algo jorobada, los sketch dinámicos, la emoción de los reconocimientos palpable y conmovedora, los grupos suben a escena y se realiza la gran foto de la familia amateur. Se acalla la música, se encienden las luces de la sala, la gente va saliendo y queda en escena un piano abandonado y el eco de las últimas notas: "Esto es.....TEATRO"